26 de febrero de 2012

Proverbio 26:4 "Nunca respondas al necio de acuerdo con su necedad, para que no seas tú también como él"



Reflexión:

El Señor nos habla de no responder mal por mal, transgresión con transgresión, humillación con humillación, por el contrario, el hombre sabio guarda sus palabras necias y no sigue la cadena del pecado. Amado lector evalué como se siente usted al ser atacado, ¿responde con ira?, ¿Es más hiriente que su agresor? o ¿es prudente y evita seguir peleando?; el hombre por naturaleza quiere aplicar una ley que para Dios es algo absurdo, la ley del más fuerte; por eso si nos cierran al conducir nosotros queremos muchas veces salir a provocar un accidente, si nos insultan en la calle por empujar sin querer a alguien nosotros respondemos con violencia o si en casa nos hacen una observación respondemos con mil piedras. Querido lector, evalué como maneja sus respuestas no vaya a ser que usted sea como el necio que responde necedad con necedad.

Oración:

Querido Padre, en el nombre de Jesús agradezco la semana que termina, declaro que la próxima semana será una semana de cielos abiertos de bendición, Padre cuida nuestras palabras, quita la necedad, la violencia, los ataques verbales y el maltrato al prójimo de nuestras vidas, danos sabiduría para calmar  al necio Señor, para cortar el pecado verbal de nuestras vidas. Amén